jueves, 7 de mayo de 2015
La Furia Del Dios De La Tormenta
El dios del Sol preparó una gran
fiesta a la que invitó a todos los dioses. No faltaba de nada en
esta ceremonia, comida, bebida, música, danza… pero los invitados
comían y bebían, pero no satisfacían ni su hambre ni su sed.
Apareció entonces un anciano, quien explicó el extraño suceso y
les comunicó que todo se debía a la furia de su hijo, el dios de la
Tormenta, quien había desaparecido llevándose consigo todo lo
bueno.
Todos los dioses decidieron buscarle
para invitarle y así recuperar los placeres, pero no le encontraron.
Desesperado, el padre del dios de la Tormenta recurrió a la gran
diosa Kamrushepa. Esta le comunicó que su hijo se había enojado y
por eso estaba todo seco. Le ordenó traer una abeja a la que dio
instrucciones para que retomara la búsqueda.
La abeja encontró al dios buscado
dormido en un bosque y lo despertó con la picadura de su aguijón.
El dios enloqueció de ira y éste se vengó con una fuerte lluvia
torrencial, acompañada de rayos y centellas contra los humanos. El
resto de dioses, estupefactos, imploraron a la diosa Kamrushepa, que
era la única capaz de apaciguar al dios.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario