Atenea se presento en forma de anciana y advirtió a la doncella que fuera mas prudente en sus palabras y que si quería desafiar a alguien que no fuera a los dioses. Aracne se mantuvo en su soberbia postura y así fue que atenea decidió aceptar la contienda y mostró su verdadero rostro.
Ambas comenzaron a hilar a gran velocidad y con una destreza nunca antes vista, todos los allí presentes se sorprendieron de la belleza que eran capaces de concebir aquellas dos mujeres. Al finalizar Atenea mostró en su tapiz a los doce dioses del olimpo perfectamente retratados y en cada una de las esquinas de la tela, represento, a modo de lección, antiguos desafíos de mortales a dioses con sus consecuencias catastróficas.
Parecía que nadie podia igualar una obra de semejante magnitud, pero cuando Aracne extendió su tela todos quedaron sorprendidos al ver la belleza y el realismo de esta. Representaba todas aquellas uniones entre dioses y mortales, todas aquellas historias de amor entre las deidades y los seres terrenales, la tela era tan perfecta que los mismos dioses bajaron a contemplarla asombrados.
Atenea viendo su derrota próxima perdió el control, y decidió no soportar tal falta de respeto, así fue que destruyo la tela de Aracne y la golpeo. La joven llena de vergüenza y arrepentimiento por la reacción de la diosa decidió poner fin a su vida ahorcándose, pero Atenea no lo permitió, y la condeno a vivir colgada e hilando por el resto de su vida y la de sus descendientes. Si, adivinaron, la transformo en una araña como su nombre lo indica.
No hay comentarios:
Publicar un comentario