Con el tiempo el hombre se escapo de su prisión pero se vio imposibilitado de huir de la región pues los soldados del rey custodiaban el puerto. Así fue que al no poder fugarse por agua decidió emigrar por aire. Para tal empresa acumulo una cantidad considerable de plumas que fue uniendo meticulosamente mediante cera. Debía construir un par de alas para el y para su hijo Icaro. Cuando estas estuvieron terminadas la probo y confirmo su genialidad al elevarse del suelo.
Rápidamente calzo el otro par de alas a su hijo y le indico que debía seguirlo a la misma altura, pues de elevarse el sol podría derretir la cera y desarmar las alas.
Padre e hijo remontaron vuelo ante los ojos sorprendidos de los habitantes de Creta que no podían concebir lo que veían.
Ahora bien, ICARO que era solo un muchacho y muy imprudente por no decir pelotudo que queda mal, entusiasmado con la posibilidad de volar y habiendo obtenido una cierta habilidad en ello, ante una distracción de su padre, decidió elevarse . Como era de esperarse la cercanía del sol aumento la temperatura y tal como lo había predicho su padre, derritió la cera con la cual se unían las plumas y le provoco una violenta caído al mar donde perdió la vida.
Dedalo volteo para ver a su hijo, pero no lo encontró. Luego diviso las plumas en el agua y su cuerpo flotando inerte. Grande fue su pena y maldijo las habilidades con que había sido dotado. Enterró su cuerpo y coloco sus alas en un templo que el mismo construyo en Sicilia en honor al dios Apolo..
No hay comentarios:
Publicar un comentario