El mito de la ciudad dice que existió un joven muy guapo llamado Alcioneo que había nacido en Delfos, una ciudad donde cerca había una gruta donde habitaba un monstruo llamado Sibaris que solo comía hombres y rebaños de ganado. La población, al estar aterrorizada, pidieron consejo al oráculo y les reveló que la única forma de acabar con la amenaza era dándole de comer a Alcioneo.
Éste aceptó y cuando iba siendo llevado a la gruta apareció otro joven llamado Euribatos, quien quedó prendado de él y se ofreció para ser devorado por Sibaris. Cuando éste llegó a la gruta se abalanzó sobre el monstruo y le rompió la cabeza. Por ello, los lorcios, pueblo de donde era Euribatos, decidieron construir la ciudad de Sibaris.
Historia y características de la ciudad
Esa era la leyenda, aunque los historiadores coinciden en que la ciudad fue fundada entre los años 720 y 710 a.C gracias al esfuerzo de muchos emigrantes procedentes de la región de Acaya,
La elección para la ubicación de la ciudad fue insuperable porque sus tierras eran excelentes para la actividad agrícola, proporcionando excelentes viñas, cereales, verduras y frutas, pero la ciudad también contaba con cera, miel, madera, betún, lana y plata, lo que hizo que creciese exponencialmente, donde todos sus habitantes vivían en la opulencia y el lujo.
Gracias a la gran cantidad de recursos con los que contaba Sibaris y al comercio que mantuvieron con las localidades vecinas, la ciudad se convirtió en un importante centro comercial donde las riquezas continuaron creciendo sin parar.
Tanta riqueza y opulencia por todos los rincones, hizo que los habitantes tuvieran una alta posición social y una de sus características principales es que solo buscaban lo exclusivo, lo que les diferenciase del resto, razón por la que se dice que se construyeron fastuosas viviendas y todo era derroche por doquier.
Según los historiadores, los habitantes de la ciudad de Crotonia pidieron asilo en Sibaris tras haber sido prácticamente expulsados de sus casas por una fuerza invasora. El gobierno local les impidió la entrada, lo que ocasionó una guerra entre ambas ciudades que finalmente se decantó por los invasores.
Cuando los crotoniatas se hicieron con la ciudad la saquearon y desviaron las aguas del río Crati para sepultar la ciudad bajo el agua y eliminarla, algo que sucedió allá por el año 510 a.C. Los restos no fueron encontrados hasta la década de los años 60 del pasado siglo XX, a casi cinco metros bajo el lodo.
Esta es la historia de Sibaris, la ciudad que pudo tenerlo todo pero que debido a su egoísmo acabó sucumbiendo.
Fuente: https://misteriosdelmundo.net
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