Atención Por Favor.

Ante todo nos dirigimos y agradecemos a todos por la ayuda que nos dan con este blog ya sean seguidores, oyentes del programa de radio y por sobre todo a todos aquellos propietarios de webs, blogs, libros y todos los lugares donde han obtenidos la información y nos han acercado a nuestro mail para que podamos publicarlas en este humilde blog, para que todas las semanas desde hace ya 7 años podamos compartir en dos emisiones las tantas historias, enigmas y misterios del universo que se van pasando de generación en generación y así reflejar esas viejas leyendas, historias, enigmas y misterios que de niños oímos mas de una vez y que nos asustaban en algunos casos como también en otras nos enseñaban a valorar y respetar esas narraciones.

Desde ya les agradezco a todos y pido disculpas si no se agrega la fuente por que muchos correos no la poseen y para no cometer errores no se agrega pero en este pequeño equipo estamos muy agradecidos para con todos. Muchísimas Gracias a todos en general por su valiosa información y por su cordial atención.

Equipo Infinito.



domingo, 11 de julio de 2021

La Llanura De Las Jarras

 


Imaginen un campo sembrado de enormes jarrones de piedra. Grandes búcaros capaces de cobijar a una persona y que parecen brotar del suelo, conformando un paisaje digno de Juego de Tronos o alguna otra historia fantástica salida de un cineasta visionario, un literato imaginativo o un dibujante de cómics de ciencia ficción. Sólo que realmente hay un sitio así y está en el sudeste asiático; en Laos concretamente y lo llaman la Llanura de las Jarras.

Ese llano, que se encuentra al pie de la cordillera Annamita, la más importante de la península indochina, en las tierras altas del norte, se denomina en realidad Xiangkhoang pero ya es más conocida popularmente por el apelativo que le dan esos singulares elementos megalíticos. Y eso que no son recientes: la datación cronológica apunta a un milenio y medio o incluso dos en sus piezas más antiguas -la Edad del Hierro-, si bien la mayor parte son algo más recientes, fechadas entre los siglos VI a.C y IX d.C.

Es decir, abarcan un espectro temporal bastante amplio, lo que supone todo un misterio ya que, pese a ello, se ignora a qué cultura adscribirlas. Un agujero en el conocimiento que ha favorecido el origen y difusión de leyendas sobre su origen; algunas tienen un matiz mitológico y hablan de un pueblo de gigantes dirigidos por un rey guerrero llamado Khun Cheung, quien, tras una memorable batalla, mandó colocar las jarras llenas de viandas para celebrar la victoria con sus hombres. Por supuesto, arqueólogos y antropólogos buscan otras explicaciones más plausibles.

Por ejemplo, hay quien propuso la teoría de que servían para recoger agua de lluvia durante la época del monzón, en previsión de la temporada de sequía, sirviendo así para que pudieran beber los miembros de las caravanas comerciales de sal que atravesaban la zona. Esta hipótesis no parece probable pero sí tiene un punto de verdad: la llanura de Xiangkhoang era un punto de paso para esas caravanas en su ruta hacia el norte de la India y quizá los viajeros depositaban ofrendas dentro de las jarras. De hecho, hay piezas parecidas en Tailandia y la India.

Las explicaciones más aceptadas apuntan a un uso funerario, atendiendo a determinados hallazgos complementarios y a los análisis tanto de las propias jarras como de su contenido, pues buena parte de ellas albergaban restos humanos. Aunque no todos, muchos huesos muestran evidencias de incineración y están envueltos en ceniza (acompañados a veces de cerámica y herramientas de hierro y bronce), algo que según la arqueóloga francesa Madeleine Colani, que excavó la llanura en los años treinta (por cierto, llevándose unas cuantas a su país), explicaría la presencia en una cueva cercana de una especie de chimeneas: sería un horno crematorio y los cántaros urnas funerarias.

Sin embargo, no es algo que acepten todos los expertos y otros opinan que si bien la llanura puede considerarse una necrópolis, el horno no tenía como finalidad la cremación de cadáveres sino para hacer moldes de las jarras. Esto también es refutado porque el material de que están hechas no es metal sino piedra: fundamentalmente de arenisca pero otras de granito, conglomerado, caliza y, algunas, incluso de coral. Esas diferencias afectan asimismo a sus formas, pues unas presentan un aspecto redondeado, como grandes ánforas, frente a las que son más bien angulares. Las mayoría no muestra decoración, salvo unas pocas con bajorrelieves y/o pinturas.

 

Fuente: Leyendas, Mitos, Misterios y Enigmas del Mundo

Jasón Y El Vellocino De Oro

 


La Expedición de Jasón y los argonautas es una historia mitológica muy importante que inspiró a varios autores a escribir sobre ella, pero sólo se conserva Medea de Eurípides.

Jasón es un héroe tesalio, hijo de Esón y Alcímeda. Cuando Pelias, hermanastro de su padre, destronó a Esón, su madre le encargó al centauro Quirón su educación. Al cumplir veinte años, Jasón se presenta en Yolco para reclamar el trono, que le correspondía por herencia. Al llegar allí tiene que atravesar un río y, además, socorrer a una anciana que le pide ayuda -en realidad era la diosa Hera, que se había disfrazado-. Al final se presenta con una piel de pantera, dos lanzas y una sandalia, pues la corriente del río se había llevado la otra. Pelias, al ver que sólo tenía una sandalia se sobresaltó cuando recordó que el oráculo le previno sobre él.

Pelias engaña a Jasón diciéndole que si realmente es meritorio del trono, tiene que ir a la Cólquide y conseguir el Vellocino de Oro. Accedió Jasón esta misión y reunió héroes de toda Grecia para ir hacia allí en la nave Argo, por eso este episodio mitológico se conoce, también, como Jasón y los argonautas.

El Vellocino de Oro

Los argonautas llegan a la Cólquide y Jasón habla con el rey Eetes para conseguir el vellocino. Eetes no quiere entregárselo y decide hacerle unas pruebas, en las que difícilmente podría salir vivo de ellas. Pero Jasón cuenta con la ayuda de Hera, Atenea y Afrodita y éstas deciden que lo mejor es que Medea, hija del rey Eetes ayude a Jasón.

Con la ayuda de Medea, Jasón supera todas las pruebas que le puso el rey, pero éste se muestra reticente y, como se niega a entregarles el vellocino, intenta matarles. Al final, Medea ayuda a dormir al dragón que guardaba el vellocino de oro y así Jasón consigue su premio. Huyen de allí, pero Eetes les persigue y, una vez más, gracias a Medea consiguen deshacerse del rey: mata a su propio hermano y tira el cuerpo por la borda de la nave, y así su padre se queda atrás.

Consiguen regresar a Yolcos con el tesoro que le había encargado Pelias a Jasón, pero se niega a cederle el trono. Entonces, Medea logra engañar a todas las hijas de Pelias, excepto alcestis, diciéndolas que así rejuvenecería, y consiguió que hirvieran a su padre en un caldero y le dieran muerte. La consecuencia es que Jasón y Medea tuvieron que refugiarse en Corinto, con la ayuda del rey Creonte.


Fuente: Leyendas, Mitos, Misterios y Enigmas del Mundo

La Pastora Y El Cóndor

 


Cerca del cerro vivía una joven pastorcita, todos los días salía acompañada de su perrito y a veces de su novio. Solían llevar a sus ovejas y llamas a pastar. Un día, al igual que otros, después de beber sus hierbas aromáticas y preparar su chapo, se encaminó al patio. Las llamas y ovejas avanzaban lentamente comiendo paja y las hierbas que habían por el camino, por su parte el perro iba delante del rebaño atajando a los animales impidiendo que se desviaran, así ayudaba a la pastora.

Un día apareció un cóndor gigantesco, este comenzó a seguir a la pastora deseándola. La pastora a pesar de su miedo empezó a conversar con el cóndor y se fueron conociendo; una tarde, ante la mirada del perro y el rebaño, el malvado del ave convenció a la pastora para dar una vuelta. Ella subió a su espalda y este la condujo a un alto cerro, ahí entraron en una cueva donde él vivía, el perro viendo que habían robado a su ama los siguió.

Conocido el sitio donde estaba la pastorcita, regresó donde estaban las llamas y las ovejas, reunió a todos los animales y los hizo avanzar, los condujo al poblado donde vivían. Una vez el perro en la casa los padres le preguntaron por su hija, el perro los llevó a donde se encontraba su hija. Cuando llegaron al lugar donde la pastora se encontraba comenzó a aullar con desesperación. Los padres, viendo que su hija se encontraba prisionera regresaron para dar aviso al novio y a los demás habitantes del pueblo y todos fueron a rescatarla. Pero el cóndor había quedado sumamente enamorado de la pastora y nuevamente la raptó para que viviera con él.

Los padres y familiares reiteradamente iban a rescatar a la pastora pero la última de aquellas ocasiones ella ya tenía alas y estaba a punto de convertirse en cóndor. Con lágrimas en los ojos los familiares retornaron dejando a su hija para siembre para que se convirtiera en esposa del ave.

 

Fuente: Leyendas, Mitos, Misterios y Enigmas del Mundo

viernes, 9 de julio de 2021

Leyenda Del Castillo De Mcdermott

 


El castillo de McDermott se encuentra en el condado de Roscommon, en el lago Lough Key, a tres kilómetros al noreste de Boyle.

Lough Key es un lago con un grupo de más de treinta islas. Una de estas islas se llama acertadamente Castle Island y aquí encontrarás las ruinas del castillo McDermott, que data del siglo XII. Se utilizó durante cuatro siglos.

El castillo fue reconstruido como una casa de verano en el siglo XVIII, pero se quemó por completo durante un incendio durante la Segunda Guerra Mundial.

Una leyenda cuenta la historia de una niña llamada Una, hija del Mr McDermott, que se enamoró de un niño de clase baja.

El padre de Una se negó a abandonar la isla con la esperanza de que esto detuviera la relación entre ambos.

Sin el conocimiento de su padre, el novio de Una comenzó a nadar a través de Lough Key para llegar al castillo y encontrarse con su amor. Sin embargo, durante uno de los cruces, el niño se ahogó.

Se dice que Una murió de arrepentimiento y pena.

Los dos fueron enterrados juntos debajo de dos árboles entrelazados que están en esta isla.

 

Fuente: Leyendas, Mitos, Misterios y Enigmas del Mundo

La Leyenda De La Huacachina

 


La Huacachina es un oasis en el desierto de ica en Perú. Su nombre significa "Mujer que llora" porque cuenta la leyenda que hubo una hermosa joven a la que llamaban la Huacachina. Esta mujer disfrutaba cantar por los campos de girasoles, bailar, ayudar al necesitado pero sobre todo cantar. Fue su canto el que atrajo a un joven guerrero Inca que al ver la belleza de dicha mujer, quedó profundamente enamorado de ella y ella de él.

Se siguieron viendo y el amor crecía entre ellos, la dulzura de la Huacachina era un tesoro que no todos los hombres podían tener, todo marchaba bien pero tristemente en esos tiempos los españoles llegaron a las tierras peruanas y el joven fue reclutado para luchar y así defender a su pueblo.

Antes de irse le prometió a su amada que regresaría y así se unirían en matrimonio para formar una familia.

El joven nunca volvió debido a que murió en una de las batallas y no tardó mucho para que la Huacachina se enterara y su corazón quedara destrozado y en unas tinieblas más oscuras que la noche.

Ella corrió y corrió hasta que se desplomó sobre el mismo campo de girasoles donde conoció a su amado y lloró amargamente.

Con el tiempo sus lágrimas iban formando una pequeña charca y luego una laguna la cual contenía sus lágrimas.

Cierto día otro joven pasó por esos lugares y al ver a la Huacachina tan indefensa y hermosa pese al dolor que su corazón sentía, él quiso hacerla suya.

Al ver las intenciones la Huacachina se levantó y se sumergió en las aguas de la laguna que ella había formado y se hundió en lo profundo.

El joven la esperó por mucho tiempo pero al ver que no salía decidió irse del lugar. La Huacachina al notar que no había peligro decidió salir pero no podía, debido a que ya no tenía piernas, sino una cola de pescado, cubiertas de escamas brillantes y hermosas.

Desde entonces los habitantes nombraron a esa laguna "La Huacachina" en honor a la joven sirena que habitaba en su interior y cuyas lágrimas de dolor por la perdida de su ser amado, formaron ese cuerpo de agua pura.

Cuenta la leyenda que cada luna nueva la joven sirena sale de la laguna para llorar por su amado guerrero que jamás volvió.

 

Fuente: Leyendas, Mitos, Misterios y Enigmas del Mundo

El Santuario De Arantzazu

 


Cuenta la leyenda vasca que, corría el año 1.468 cuando la mismísima Virgen se le apareció a un cabrero que respondía al nombre de Rodrigo de Balzategi al tiempo que este desarrollaba su jornada pastoral. Situada en medio de un espino, el pastor, totalmente boquiabierto y sorprendido le preguntó: «Arantzan zu?», que equivale a decir en castellano: “¿tú, entre los espinos?”.

Los siglos posteriores, en ese punto de Guipúzcoa, encuadrado en un impresionante barranco natural, sumergido entre las rocas, se erigió el santuario como un punto ineludible de rezo, culto, erudición, devoción y peregrinaje.

El edificio fue levantado en la época medieval pero sufrió, al menos, dos incendios de envergadura a lo largo de su historia que lo dejaron casi inutilizable. Finalmente, en 1950, y a través de varios concursos, fue construyéndose lo que es la base del santuario que hoy podemos ver, visitar y disfrutar.

Las vistas del Santuario de Arantzazu y su enclave son su punto fuerte. Permanece completamente rodeado de montañas rocosas y de vegetación, al borde de pequeñas simas. Se integra perfectamente en un entorno natural que se encuentra a escasos diez kilómetros del pueblo de Oñate, en la provincia vasca de Guipúzcoa, en pleno País Vasco.

Para la construcción de este santuario, a mediados del siglo XXI, se conformó un equipo de artistas únicos. El lugar es espectacular por el edificio en sí, pero también por el ambiente que proyecta. Tiene una fuerza especial, es un lugar para mirarse hacia dentro, estar tranquilos, conectar con la naturaleza, reflexionar, etc.

A mediados del siglo XX, en 1950, el proyecto de construcción del Santuario de Arantzazu fue un hecho importante en dos vertientes: en la arquitectura y el arte del País Vasco, que entró en ese mismo momento en la modernidad. Fue una novedad que un templo religioso adoptara esas expresiones plásticas tan modernas y vanguardistas.

El Santuario de Arantzazu, la entrada del País Vasco en la vanguardia artística

La arquitectura supuso un síntoma de distensión en un franquismo al que se le exigía apertura en sus relaciones internacionales, sobre todo con Estados Unidos. La participación en el proyecto de los célebres arquitectos Sáenz de Oiza y Luis Laorga, que consiguieron enrolar en el mismo a otros artistas como Jorge Oteiza, el célebre escultor Eduardo Chillida, los pintores Lucio Muñoz o Nestor Basterretxea entre otros, supuso un shock. Se trataba de la más importante manifestación de la contemporaneidad en el País Vasco, una nueva etapa artística se había abierto. Fue una iglesia revolucionaria.

Las dos torres gemelas que enmarcan la fachada del santuario y la torre del campanario están realizadas con bloques de piedra caliza tallados en punta de diamante. La morfología en espinas, en puntas, está relacionada con la leyenda que abre este artículo: es un homenaje.

La entrada a la iglesia está vigilada por los asombrosos apóstoles de Jorge Oteiza. La figura de la piedad, situada arriba de estos, tuvo una gran polémica por relacionar la imagen con la lucha armada de ETA. Además, bajo los apóstoles, se abren las grandes puertas de hierro ideadas por Eduardo Chillida, que están resueltas de una forma completamente abstracta, que recibieron el nombre de “las puertas del infierno”.

El interior del Santuario de Arantzazu, una apariencia engañosa

El interior de la iglesia es un espacio más convencional que el resto. La planta es lo que más se parece al proyecto original. Esto se debe a que está condicionada por la base de la iglesia antigua que se quemó. Dentro de la misma, se puede percibir el desarrollo de los muros que aprovechan el suelo de antaño.

a iglesia parece normal, con forma de cruz latina, pero la percepción de la misma cambia conforme el visitante se acerca al altar. La nave principal tiene 17 metros de ancho por 30 metros de largo y 17 de altura. Las vidrieras, preciosas, son del fraile Javier María Álvarez de Eulate.

Por otro lado, el retablo de Lucio Muñoz es impresionante, tiene unas dimensiones imponentes, monumentales… El origen de la luz procede de un gran ventanal que se ubica arriba. Asimismo, el retablo, realizado en 1962, de 600 metros cuadrados y tallado en madera, otorga al recinto un aspecto de cueva oscurecida. Se trata de una evocación del paisaje de los barrancos que rodean a la iglesia. Los materiales que utilizó Lucio Muñoz fueron la madera, la arena, virutas, etc., que dotan al conjunto de un color tirando a ocre.

En medio del retablo se sitúa la causante de todo esto: la talla original de la virgen de Arantzazu junto a un cencerro, que hace alusión al pastor al que se le apareció. Esta tiene pequeñas dimensiones, como se supone que se la encontró el pastor. Es una talla gótica realizada en piedra. En la mano derecha, porta una bola que intenta representar el globo mundial.

Un lugar insólito para una iglesia

Bajo la actual construcción se halla la iglesia del siglo XIX, convertida hoy en cripta. En sus paredes se encuentran las pinturas del artista Néstor Basterretxea, que muestran la evolución del ser humano y Cristo resucitado. Estos murales, que fueron desarrollados en dos fases, no es lo que alguien espera encontrar en una cripta de una iglesia: el color, las formas… todo es especialmente moderno. Se puede divisar encima del altar un cristo de grandes proporciones en color rojo en una cruz deformada.

Este es un lugar insólito para fundar una iglesia. La orden de los franciscanos lleva encargándose del santuario desde el siglo XVI. Existen muchos grupos de peregrinación, organizados por las comunidades cristianas, que acuden a este majestuoso y vanguardista santuario a rezar. No es raro ver grandes grupos visitando esta emblemática, accidentada y premiada construcción.

Aquella virgen que encontró un pastor, según la leyenda, con el tiempo se convirtió en la patrona de Guipúzcoa. Arantzazu, la expresión con la que el pastor se dirigió a la virgen, es una expresión común en todo el País Vasco y en parte del planeta. Este es un lugar para la meditación y la búsqueda, un espacio único que sobrecoge e inspira.

 

Fuente: Leyendas, Mitos, Misterios y Enigmas del Mundo

miércoles, 7 de julio de 2021

El Coño De La Bernarda, El Origen De Una Leyenda

 


La escena es esta. Un joven decide hacer una fiesta en su casa e invita a algunos compañeros de clase. “¿Puedo llevar un par de amigos?”, le dice uno de ellos. El joven accede. Para cuando llega la juerga, sin saber cómo, su casa se ve atestada de gente que ni siquiera conoce. La voz ha debido de correrse. El joven se agobia y grita ante los ojos atónitos de todos: “¡Esto parece el coño de la Bernarda!”.

Esta expresión tan refinada y tan castiza es usada así en situaciones como la descrita: cuando reina el caos o cuando un lugar se abarrota de gente. Es como decir “aquí dejan entrar a cualquiera”. Pero, ¿de dónde proviene esta forma de hablar tan de España? ¿Quién era Bernarda?

O santa o prostituta

Hablar del chumino de la Bernarda es hablar de una amalgama de mitos que sitúan a la mujer en ciudades dispares: desde Sevilla o Granada hasta Ciudad Real e incluso hasta Marruecos. También existen dos historias sobre su oficio. Así, o bien fue una santa, o bien todo lo que se considera contrario a ello, una prostituta. Vamos que no es que no fuera, como rezan algunos lemas feministas, “ni santa ni puta”. En el caso de Bernarda fue, de hecho, o una cosa o la otra.

La vagina mágica

Una de estas leyendas, seguramente la mejor, es la desarrollada por el escritor Manuel Talens en su novela La parábola de Carmen La Reina. Esta narración sitúa a Bernarda en el municipio de Atarfe o en la ficticia Artefa, a fin de cuentas en Granada. Corría el siglo XVI cuando vivía en estos lares una mujer querida en todo el pueblo. Era sacristana de la ermita y se encargaba de remediar las más dispares dolencias, por lo que se la conocía como santera. Su nombre era, claro, Bernarda.

Hasta aquí la historia podría ser verosímil, pero la cosa adquiere un cariz más fantástico, y más divertido, cuando la santera recibe la visita de San Isidro Labrador. Desde que el santo se pasara por los aposentos de la Bernarda, corrió la voz de que las partes pudendas de la mujer tenían propiedades mágicas. Fue entonces que todos los habitantes de Artefa pasaron por la casa de la santera y metían sus manos en su vagina.

Los resultados no se hicieron esperar. Las mujeres parían hijos fuertes como robles, las cosechas alumbraban abundantes frutos, las gallinas empollaban huevos de siete yemas… A Artefa no le podía ir mejor. Ah, y la cosa mejoraba si al introducir la mano en el cuerpo de Bernarda se recitaba la frase: “San Isidro labrador, quita lo seco y le devuelve el verdor”.

El santo «coño»

Cuando la Bernarda murió las desgracias que hasta ahora se habían evitado gracias a sus peculiares propiedades mágicas, no se hicieron esperar. Las cosechas se hicieron pobres, las mujeres y los animales sufrían abortos sin parar. Hasta los terremotos se cebaron con Artefa.

Menos mal que a los vecinos no se les ocurrió otra cosa que desenterrar el cuerpo de la santera. Bajo la tierra, el cadáver de Bernarda se había descompuesto, a excepción de una parte… ¿Cuál sería? Efectivamente: Sus genitales. Solo estos se habían conservado incorruptos, esto es, como lo hacen las momias. El párroco de Artefa ordenó entonces el traslado del milagro a la parroquia. Así fue como se procedió a colocar el trozo de carne reseca en un relicario bautizado como el Coño de la Bernarda. Desde entonces, cualquiera que lo tocaba sufría las bendiciones de la santera.

La Bernarda manchega

Una historia muy parecida es la que campa por las tierras de Ciudad Real. Según este relato Bernarda vivió también como santera en el mismo siglo XVI en el que transcurre el mito en Granada. En este caso, los milagros que Bernarda obra con sus partes más íntimas, que curaban animales enfermos de pastores, atrae las sospechas de la Iglesia. Sin embargo, después de ser examinada por los monjes, su fama de santa corrió como la pólvora por las tierras de Don Quijote. Una vez fallecida, al igual que en el caso granadino, sus genitales se mantuvieron incorruptos.

Bernarda la prostituta

En el otro extremo, como ya se ha indicado, se piensa que Bernarda pudo ser una prostituta que ejerció su profesión en Sevilla o en Marruecos. Una historia, en realidad, con tintes más verosímiles y también más sosainas y turbios. En ambos relatos, el de Sevilla y el del país africano, Bernarda habría ejercido la prostitución, convirtiéndose en la obsesión de los hombres. Tanto que no dejarían a sus genitales ni un momento de respiro.

En el caso de Marruecos, Bernarda habría acudido al país en medio de la Guerra del Rif y sus clientes habrían sido los soldados procedentes del desembarco militar de Alhucemas. Por otro lado, en el caso de Sevilla, la prostituta habría ejercido la prostitución hasta morir por castigo divino.

¿Moraleja contra la prostitución o crítica a la religión?

Mientras las historias que sitúan a Bernarda como santera se mofan de algún modo de la Iglesia y sus remilgos hacia los genitales femeninos, la historia que transcurre en Sevilla es más una moraleja de lo que puede pasarte si ejerces tal profesión según la religión. ¿Cuál de las versiones es la correcta? ¿Guardan estas narraciones alguna porción de realidad? Estas preguntas tendrán que permanecer, al menos por ahora, sin respuesta. Pero, mientras, la expresión de “el coño de la Bernarda” seguirá traspasando los siglos.

 

Fuente: Leyendas, Mitos, Misterios y Enigmas del Mundo

La Leyenda De Juan El Inglés, La Única Mujer Que Encabezó El Papado

 


Ninguna crónica contemporánea a los hechos relacionados con Juan el Inglés acredita la historia, tampoco la lista de papas deja ningún resquicio en que se pueda insertar el pontificado. ¿Pero qué pasó verdaderamente?

El papado romano católico a lo largo de su historia no permitió a ninguna mujer que se hiciera Papa. A las mujeres se las consideraban impuras e intelectualmente inferiores. "Toda mujer debería sonrojarse de vergüenza con solo pensar que es mujer", dijo Clemente de Alejandría por el siglo II.

Existen varias versiones e interpretaciones de la leyenda sobre la Papisa, pero no hay un acuerdo sobre las fechas, se data del siglo IX o XII, del momento de la reforma gregoriana. Sin embargo, la mayoría de las versiones tienen muchas semejanzas entre sí. En síntesis, en los relatos se trata de Juana que nació en Alemania. Como ya hemos visto, los prejuicios de aquellos tiempos sobre mujeres no dejaban que ellas recibieran educación. Así que Juana, vestida de un monje, fue a Atenas junto con un religioso que supuestamente era su amante. Allí como hombre pudo estudiar y todos la destacaban por su facilidad de aprender.

Su gran poder de oratoria le sirvió para adelantarse en la Iglesia Católica. Tras regresar a Roma, entró a los religiosos círculos y ganó mucha fama por sus profundos conocimientos de varias áreas. Empezó en la carrera eclesiástica bajo el nombre masculino de Johannes Anglicus (Juan el Inglés) y en primero trabajó como notario de la Curia.

Su nueva situación le permitió viajar de monasterio en monasterio, donde profundizó aún más su cultura y distintas habilidades. Conocer a más teólogos y filósofos y conseguir popularidad entre los fieles de Roma le dieron el puesto de Cardenal y al final fue elegida papa en el año 855. No se precisa a qué pontificado corresponde pero en los numerosos escritos se barajan los de Juan VIII o Benedicto III.

Sin embargo, no tanto fue popular entre los fieles como entre los hombres y se quedó embarazada. Escondió su estado gracias a las grandes túnicas de papa pero finalmente, según las leyendas, dio a luz durante una procesión.

A partir de ese momento podemos hablar de al menos dos versiones sobre lo que le pasó después. Según el cronista católico Jean de Mailly, los fieles airados la lapidaron. Otro cronista Martín de Opava escribió que ella falleció a consecuencia del parto. Existe una extensa versión y relata de lo que al dar a luz a un niño Juana murió atada a los pies de un caballo que la arrastró por toda la ciudad.

El hecho que una mujer logró elegirse un Papa, causó la aparición de una tradición en el Vaticano en la que los sucesores del papado para ser aceptados, eran colocados en la conocida "silla episcopal". El "mueble" era de mármol con un agujero en el centro. La ceremonia era una comprobación de que los candidatos tenían testículos. Una vez confirmado, el encargado de la inspección gritaba "habet duos testículos et bene pendentes" que significa "tiene dos testículos y cuelgan bien". Hoy en día la tradición ya no se practica, se quedó en los Siglos medios.

Sin embargo, la Iglesia Católica nunca ha confirmado oficialmente que tal ritual existiera tanto como hubiera la propia Juana.

Hay varios argumentos que hablan en contra de ella. Las pruebas principales del carácter mítico de la papisa se basan en los hechos: Primero, no hay ninguna mención de ella en las fuentes contemporáneas al suceso. Es increíble que la aparición de una papisa no fuera notada por los historiadores de entre los siglos X y XIII (el siglo cuando surgieran las primeras versiones de la leyenda). Segundo, en la lista del papado no hay ningun enlace en el que encajaría esta figura.

 

Fuente: Leyendas, Mitos, Misterios y Enigmas del Mundo

Leyenda De La Bruja De Blair

 


Parece ser que los orígenes de la leyenda comienzan en Maryland, en los bosques de Black Hills, un lugar en el que, según narran las tradiciones de la zona, ni siquiera las tribus de nativos americanos se atrevían a entrar. Tanto es así, que en torno al año 1630, el coronel Nathaniel Blair dirigió una expedición para recorrerlo, con el fin de encontrar un lugar idóneo para la construcción de un fuerte. Nathaniel pidió ayuda a una tribu de aquella zona y como respuesta lo que hicieron fue sabotear su expedición. A pesar de ello, Blair y sus hombres construyeron el fuerte que bautizaron con el apellido del coronel y que, con el paso de los años, iría creciendo hasta convertirse, en 1634, en la ciudad de Blair.

Distintas historias narran que 150 años después, en torno al año 1785, una vecina de Blair llamada Elly Kedward, inmigrante de origen irlandés, fue acusada por varios niños de practicar la brujería. Los pequeños afirmaron que los había arrastrado a la fuerza hasta su casa con la intención de beber su sangre. El temor se desencadenó entonces por toda la población, y Elly Kedward fue condenada por brujería y desterrada de Blair para siempre. Atada a una carreta, fue abandonada en los bosques, durante el crudo invierno.

Pasaron los días y la población de Blair respiró tranquila al creerla muerta a causa del frío o de las bestias salvajes que poblaban aquellas montañas. Sin embargo, 3 de los niños, acompañados por sus perros regresaron al bosque para comprobar si realmente había fallecido y, para su sorpresa, se toparon con que la supuesta bruja seguía viva. Entonces, los chicos ordenaron a sus perros que remataran el trabajo, mordiéndola, mientras ellos la apaleaban con ramas de los árboles. Estando moribunda decidieron soltarla de la carreta y colgarla de un árbol hasta que Elly Kedward expiró. Será a partir de entonces cuando comiencen a suceder numerosos fenómenos extraños en los bosques de Black Hills

Así, un año más tarde, en noviembre de 1786, cuentan que desapareció la mitad de los niños del pueblo, incluidos los tres que mataron a Elly. Ninguno de ellos fue encontrado, ni vivo ni muerto. Ante el temor de que dichas desapariciones se debieran a la intervención de fuerzas maléficas y a la existencia de una maldición, los vecinos del lugar abandonaron Blair y juraron no volver a pronunciar más el nombre de Elly Kedwards. Sin embargo, en 1809 apareció un libro llamado "Blair Witch Cult", ("El culto a la bruja de Blair"). Este libro, insólita obra de ficción de muy poca calidad, cuenta la historia de una aldea maldita por una bruja. El pueblo es Blair y la bruja, Elly Kedwars. Sin embargo, en este relato se da caza a la bruja, quien es quemada por sus crímenes.

De Blair a Burkittsville

Fueron más de 40 los años que tuvieron que pasar antes de que alguien volviese a residir en aquel lugar. Hacia 1820, un hombre llamado Henry Burkitt compró al gobierno la abandonada ciudad de Blair. Poco a poco reconstruyó sus edificios, que se encontraban en ruinas, y en 1824 rebautizó el lugar con su propio nombre: Burkittsville, un pueblo que aún existe y, a día de hoy, es visitado por muchos turistas gracias a la historia de la bruja.

Agosto de 1825: once vecinos aseguran que del Tappy East, río que cruza Burkittsville, emerge una mano de mujer, extremadamente pálida, para arrastrar bajo el agua a la niña Eilleen Treacle, de diez años. La búsqueda de la pequeña se prolongó durante semanas pero su cuerpo nunca llegó a recuperarse. Poco después el río se vio obstruido por culpa de una increíble cantidad de ramas, afectando a la potabilidad de sus aguas, que estuvieron contaminadas durante varios meses, siendo ésta la más que probable causa de la extraña muerte de un vecino del pueblo.

Posteriormente, en marzo de 1886, Robin Weaver, de 8 años, es dada por desaparecida en el bosque, enviándose diversos equipos de salvamento en su búsqueda durante varios días, hasta que dieron con ella. La pequeña relató que en los bosques se había encontrado con una vieja dama que no andaba, sino que flotaba. Aquella extraña señora la tomó de la mano y la llevó hasta una casa donde la dejó en el sótano, prometiéndole volver. Robin la esperó durante mucho tiempo, pero comenzó a tener miedo y, finalmente, huyó. Quienes no regresaron jamás fueron los miembros de uno de los equipos de rescate. Semanas más tarde, otros cinco rescatadores encontraron los cuerpos en Coffin Rock: se encontraban atados entre sí de pies y manos, y habían sido destripados. Volvieron al pueblo para dar parte del suceso, pero cuando regresaron al lugar de los hechos, los cadáveres ya no estaban allí.

Finalmente, entre noviembre de 1940 y marzo de 1941 se produjo otro incidente, desapareciendo ocho niños del pueblo. La intranquila y ya poco agradable vida de los lugareños de Burkittsville se vio aún más perturbada cuando el ermitaño Rustin Parr acude al mercado y grita: "¡por fin he terminado!". Tras interrogarle sin obtener respuesta alguna, indica a los policías que le sigan hasta su cabaña, donde lo entenderán todo.

Tras cuatro horas de caminata, al llegar a la pequeña cabaña, descubrieron los cadáveres de siete de los pequeños, enterrados en sus correspondientes siete pequeñas tumbas, situadas detrás de la casa. Al exhumar los cadáveres se observaron signos de violencia: algunos incluso estaban destripados y todos parecían haber sido víctimas de un ritual diabólico, luciendo extraños símbolos sobre manos, cara, pecho y tobillos. Kyle Brody fue el único que sobrevivió a la matanza. Fue encontrado de pie, en una esquina del sótano. Parr explicó a las autoridades que escuchaba en su cabeza la voz de una anciana que le ordenaba asesinar a los niños y le dirigía en los rituales practicados. Fue juzgado por tan terribles crímenes, condenado a la horca y ejecutado.

 

Fuente: Leyendas, Mitos, Misterios y Enigmas del Mundo

lunes, 5 de julio de 2021

San Jorge Capadocia y La Leyenda De El Dragón

 


Durante el medievo europeo, concretamente en pleno siglo IX, surgió en Occidente la historia de San Jorge a caballo, victorioso tras derrotar a un dragón. Un relato que, probablemente, sea el origen de numerosos cuentos de hadas sobre princesas y dragones. Pero, ¿qué realidades se ocultan tras esta mítica narración?

Jorge de Capadocia, una vida de leyenda

Según narra la tradición, un joven romano de nombre Jorge, nacido en la antigua Capadocia (actual Turquía) entre los años 275 y 280 de nuestra era, tras morir su padre Geroncio, oficial del ejército romano, se trasladó junto a su madre Policromía hasta la ciudad natal materna: Lida, la actual Lod de Israel. Una vez allí, Policromía educaría a su hijo en la fe cristiana.

Jorge, tras cumplir la mayoría de edad, decidió seguir los pasos de su difunto padre y se enroló en el ejército, donde no tardó en ascender hasta el punto que antes de cumplir los 30 años, fue nombrado tribuno, siendo destinado a Nicomedia (actual Izmit) como guarda personal del emperador Diocleciano.

En el año 303, el emperador decretó un edicto que autorizaba la persecución de los cristianos. Jorge, que recibió órdenes de participar en esta persecución, confesó que él también era cristiano, por lo que Diocleciano ordenó que le torturaran y, finalmente, que fuese ejecutado. Tras ser decapitado frente a las murallas de Nicomedia el 23 de abril del año 303, el cuerpo de Jorge fue enviado a Lida para ser enterrado.

Aunque lo expuesto hasta ahora no constituye un relato exactamente histórico, sí es cierto que su veneración como mártir comenzó relativamente pronto. Tanto es así que, durante el siglo IV, dicha veneración se extendió desde Palestina al resto del Imperio Romano de Oriente para, más tarde, en pleno siglo V, popularizarse en las regiones más occidentales del imperio.

De hecho, existen datos proporcionados por los relatos de diversos peregrinos cristianos de la construcción de una iglesia en su honor durante el reinado de Constantino I en Diospolis, la antigua Lida. A su vez, Hacia los años 518-530, el archidiácono y bibliotecario Teodosio afirmaba que Diospolis era el centro del culto a Jorge. Un peregrino anónimo de Piacenza mencionaba este mismo hecho hacia el año 570.

La iglesia habría sido destruida en el año 1010 y reconstruida por los cruzados. Posteriormente, durante la Tercera Cruzada habría sido destruida de nuevo por los hombres de Saladino en el año 1191. Varios siglos después, en 1872, una nueva iglesia fue erigida y aún se mantiene en pie.

En el año 494, Jorge de Capadocia fue canonizado por el papa Gelasio I, lo que motivó la creación de diversas historias apócrifas sobre su vida, varias de ellas llenas de milagros. El texto más antiguo sobre su vida que ha llegado hasta nosotros se encuentra en el Acta Sanctorum. Asimismo, hacia finales del siglo VI, el abad irlandés Adomanis de la abadía de la isla de Iona dio a conocer algunas de las leyendas orientales de Jorge reunidas por el obispo galo Arkulf en su peregrinación a Tierra Santa del año 680.

Además, durante los comienzos del Islam, a Jorge de Capadocia se le identificó —a través del sincretismo religioso y cultural— con el profeta judío Elías, el predicador judío samaritano Phineas y el santo islámico al-Jadir, dando lugar a una figura religiosa que todavía es venerada en Oriente Próximo.

San Jorge y el dragón

Fue en el siglo IX cuando surgió la historia de San Jorge a caballo venciendo a un dragón. Dicha historia conforma el más que probable origen de todos los cuentos de hadas occidentales sobre princesas y dragones. Se trata de una leyenda que se narra en diversas regiones de Europa y Asia menor como propia. Incluso nos la podemos encontrar en Japón, aunque, claro está, los detalles varían según las tradiciones locales.

La leyenda medieval comienza con un dragón que decide anidar en la fuente que provee de agua a una ciudad que, según una tradición cristiana ortodoxa, sería Beirut, capital del Líbano, de la que San Jorge es santo patrón.

Los ciudadanos ofrecían al dragón, diariamente, un sacrificio humano que se decidía al azar entre todos los habitantes del lugar. Sólo de ese modo el dragón les permitía recoger el agua necesaria. Un día resultó seleccionada la princesa local.

En algunas versiones aparece el rey pidiendo por la vida de su hija, pero sin éxito. De esta forma, cuando estaba a punto de ser devorada por el dragón, apareció Jorge que se hallaba de paso por la comarca en uno de sus muchos viajes, se enfrentó con el dragón, lo mató y salvó a la princesa. Entonces, los agradecidos ciudadanos abandonaron el paganismo y abrazaron el cristianismo.

Según una antigua interpretación cristiana del mito, Jorge personificaría a los creyentes, su caballo a la Iglesia, y el dragón representaría al paganismo, la idolatría, la tentación y Satanás. Sin embargo, según muchos historiadores laicos, la leyenda tendría raíces más antiguas que las cristianas. Para ellos, el dios Sabacio, padre celestial de los frigios, vendría a ser uno de sus principales antecesores: en su imagen a caballo, arrollando a una serpiente, estaría el origen de la popular imagen de San Jorge sobre un caballo blanco. Además, la historia de San Jorge y el dragón también presenta numerosos elementos comunes con el mito griego de Andrómeda y su salvador y posterior esposo Perseo, vencedor de la Gorgona Medusa.

En todo caso, sean cuales sean sus orígenes, lo que sí es un hecho demostrable es que en el Reino Franco Merovingio, hacia el siglo VI, ya se veneraba a Jorge de Capadocia, aunque no sería hasta la Alta Edad Media, con sus caballeros y cruzadas, cuando su culto se extendería por Europa.

De hecho, San Jorge se convirtió en patrón de los caballeros y soldados, además de ser considerado el santo protector de algunas órdenes religiosas militares, como la Orden Teutónica o la de los Caballeros Templarios.

Hacia el siglo XII, la leyenda empezó a extenderse por toda Europa. Uno de los principales responsables de dicha difusión fue Santiago de la Vorágine, arzobispo de Génova, quien a mediados del siglo XIII escribió la Legenda Sanctorum, una colección de fábulas sobre distintos santos en la que la historia de Jorge de Capadocia destacaba entre otras. El libro, por el valor que tenía a ojos de los lectores, acabó siendo conocido como Legenda aurea o Leyenda dorada. La información contenida en sus 177 capítulos (algunas versiones presentan 182), se considera falsa en la actualidad, pero de notable valor por su gran influencia en la literatura y la pintura de Europa Occidental.

De este modo, durante los últimos siglos de la Edad Media, San Jorge se convirtió en patrón de ciudades, aldeas y casas nobles. También llegó a ser el primero de los catorce santos protectores de los animales domésticos.

 

Fuente: Leyendas, Mitos, Misterios y Enigmas del Mundo

El Château De Brissac y El Fantasma De La Dama Verde

 


El Château de Brissac es un castillo situado en la comuna de Brissac-Quincé, perteneciente al departamento de Maine-et-Loire, Francia. Fue construido en el siglo XI y cuenta con una historia larga y apasionante. Como ocurre con muchos otros castillos de todo el mundo, el Château de Brissac está encantado y tiene su propio fantasma. Se trata de ‘la Dame Verte’, la Dama Verde, quien según la leyenda es el fantasma de una esposa infiel asesinada por su marido en el siglo XV.

La historia del castillo

Calificado como ‘el más alto castillo de Francia’, se cuenta del Château de Brissac que fue construido originalmente como castillo para los condes de Anjou en el siglo XI. Durante el siglo XV, el château fue reconstruido como fortaleza por uno de los ministros de Carlos VII. Durante las guerras de religión de Francia, que estallaron en el siglo XVI, Enrique de Navarra (que más tarde reinaría como Enrique IV de Francia), tomó posesión del château. Cuando Enrique fue coronado rey de Francia, el château fue otorgado a Carlos II de Cossé como recompensa por su apoyo. Carlos fue además nombrado ‘Duque de Brissac’ en reconocimiento a los servicios prestados.

Durante las guerras de religión de Francia parece que el Château de Brissac sufríó graves daños, y el rey concedió a su recién nombrado duque los fondos necesarios para reconstruirlo. Durante la Revolución Francesa los descendientes de Carlos fueron desalojados del château. Además, el castillo fue saqueado y sufrió daños durante este caótico período, quedando sumido en el abandono durante el siguiente medio siglo. Pero a mediados del siglo XIX volvería a ser propiedad de los Duques de Brissac, y en este período se emprendieron importantes y profundas reformas en el edificio. En la actualidad, aproximadamente siglo y medio más tarde, el château sigue siendo propiedad de los Duques de Brissac, y a día de hoy es la residencia del 13er duque. El castillo puede ser visitado por el público actualmente.

La Dama Verde

El más famoso habitante del Château de Brissac es la ‘Dama Verde’, el fantasma del castillo. Según la leyenda, la Dama Verde es el espíritu de una mujer llamada Charlotte de Brézé, hija ilegítima de Carlos VII y su amante Agnès Sorel.

Charlotte era por tanto hermana (por parte de padre) del rey Luis XI. En 1462, se concertó el matrimonio entre Charlotte y Jacques de Brézé, miembro de la nobleza. Se ha afirmado de esta unión que estaba motivada por razones políticas, y que Charlotte y Jacques no se amaban. Además, también se ha dicho de esta pareja que tenían caracteres muy diferentes. Por ejemplo, parece que Jacques disfrutaba con las actividades al aire libre, como la caza, mientras que Charlotte se sentía más inclinada a una vida de lujo.

El 31 de mayo de 1477, Jacques regresó de una batida de caza, cenó con su esposa y a continuación se retiró a sus aposentos. Parece que la pareja no dormía en la misma cama habitualmente, y en plena noche, un criado despertó a Jacques informándole de que su esposa estaba con su amante, un hombre llamado Pierre de Lavergne. Jacques les atrapó con las manos en la masa, y en un arrebato de ira dio muerte a la adúltera pareja. Al parecer el duque abandonó el castillo poco después de haber perpetrado el asesinato, ya que no podía soportar escuchar los ardientes gemidos que proferían los fantasmas de su esposa y el amante de ésta.

El castillo en la actualidad

A día de hoy, parece que solo sigue presente en el Château de Brissac el fantasma de Charlotte, ya que no se conocen testimonios de avistamientos del fantasma de Pierre (que quizás habría seguido su propio camino en algún momento de la historia). Los duques del castillo y sus familias dicen haber crecido acostumbrándose a la presencia del fantasma de Charlotte, aunque también afirman que el fantasma ha aterrorizado a numerosos invitados

Se cuenta que el escondite favorito de Charlotte es la capilla de la torre, donde se la puede ver con su vestido verde, de ahí su apodo de Dama Verde. Además, algunos testigos han explicado que el rostro del fantasma tiene agujeros donde deberían estar su nariz y sus ojos, quizás a consecuencia de lo que le hizo Jacques de Brézé a su esposa al asesinarla. Se dice también que sus gemidos se pueden escuchar en todo el Château desde que anochece hasta altas horas de la madrugada.

 

Fuente: Leyendas, Mitos, Misterios y Enigmas del Mundo

La Dama Blanca De Kinsale

 


La Dama Blanca de Kinsale es una famosa historia de fantasmas irlandeses. El trágico relato tiene lugar en el Fuerte Charles, donde la gente ha visto el fantasma de una joven novia vagando por el sitio donde ella y su amada encontraron su destino final.

La historia del fuerte de Charles

Kinsale es una ciudad costera situada en el condado de Cork, en la parte suroeste de Irlanda. Debido a su ubicación estratégica, la ciudad desempeñó un papel destacado en la historia de Irlanda. Durante el siglo VI, St. Multose fundó un monasterio, en el sitio que eventualmente se convertiría en la ciudad de Kinsale. Cuando los vikingos llegaron en el siglo X, Kinsale se convirtió en un puerto comercial y continuó desempeñando este papel cuando los anglo-normandos desembarcaron en el siglo XIII. Kinsale continuó prosperando en los próximos siglos y, para fines del período medieval, podría considerarse una de las ciudades más importantes de la costa sur de Irlanda.

En 1601, una expedición militar española aterrizó en Kinsale. En ese momento, la guerra de los nueve años (también conocida como la Rebelión de Tyrone) estaba siendo combatida por los irlandeses contra el dominio inglés en Irlanda. Los españoles apoyaban a los irlandeses, y se suponía que la expedición de 1601 debía ponerse en contacto con los rebeldes irlandeses para atacar a Inglaterra desde Irlanda. Esto no funcionó como estaba previsto, y Kinsale pronto fue asediado por los ingleses. El asedio de Kinsale duró desde octubre de 1601 hasta principios de 1602, y fue ganado por los asediadores ingleses. Este asedio fue la última batalla en la Guerra de los Nueve Años.

En las décadas posteriores a la guerra, los ingleses comenzaron a construir fortificaciones en la costa para evitar que los enemigos capturaran a Kinsale tan fácilmente en el futuro. Alrededor de 1677, el conde de Orrey ordenó la construcción de un nuevo fuerte para comandar el punto Ringcurran en el lado este del puerto de Kinsale. El fuerte fue nombrado Charles, en honor de Carlos II, el rey de Inglaterra en el momento de la construcción del fuerte. El fuerte fue diseñado por el reconocido arquitecto William Robinson y utilizó el diseño más avanzado que estaba disponible en ese momento.

Aunque el fuerte protegía a la ciudad de cualquier ataque desde el mar, tenía un defecto grave. Mientras Charles inspeccionaba el Fuerte en 1685, el ingeniero militar Thomas Phillips señaló que el fuerte era vulnerable a los ataques terrestres, ya que era ignorado por los terrenos más altos. Cinco años más tarde, Charles fue asediado por primera y última vez en su historia, y como se podría esperar, fue un ataque terrestre. Las baterías de cañón se establecieron en el terreno elevado sobre el fuerte, y luego de un asedio de 13 días, los defensores se rindieron.

La historia de fantasmas de la Dama Blanca de Kinsale

En algún momento de la historia del fuerte, se adjuntó una historia de fantasmas al sitio. El incidente supuestamente ocurrió en algún momento durante el siglo XVII e involucró al comandante del fuerte, a su hija y a su esposo, que era uno de los oficiales de su padre. Las historias no mencionan los nombres de estos personajes, aunque una fuente afirma que se suponía que el comandante era un hombre llamado Warrender.

En cualquier caso, el comandante del fuerte tenía una hija, que se enamoró de uno de los oficiales del padre. Después de un corto período de cortejo, los dos se casaron. En la noche de su boda, la pareja dio un paseo por las murallas del fuerte y vio una sola rosa blanca que crecía debajo. Un centinela de servicio se ofreció como voluntario para obtener la flor como regalo de bodas para la pareja, si el oficial tomaba su lugar mientras él no estaba. El oficial estuvo de acuerdo, y el centinela se fue a buscar la rosa. Por una razón u otra, el centinela tardó mucho más de lo esperado, por lo que el oficial envió a su esposa de vuelta y siguió haciendo guardia

Como resultado de todas las festividades de ese día, el oficial se cansó y se quedó dormido. No mucho después, el comandante estaba haciendo sus rondas y vio al oficial dormido. Como era el protocolo del día, le disparó al oficial dormido, dándose cuenta demasiado tarde de que era su yerno. Al ver lo que había hecho, el comandante se suicidó saltando de las murallas. Cuando la nueva novia se despertó, fue a buscar a su esposo y vio su cadáver. Mirando por encima de las murallas, ella también vio el cuerpo de su padre. La novia, incapaz de soportar su dolor, saltó de las murallas, y se dice que su fantasma, vestido con un vestido de novia, persigue el fuerte desde entonces.

Los avistamientos de la dama en blanco de Kinsale a diferencia de muchas otras , son bastante extraños. Por ejemplo, los personajes de este cuento ni siquiera tienen nombre y la fecha en que el incidente ni siquiera se menciona. Además, no hay otra evidencia que sugiera que estos eventos realmente tuvieron lugar.

Sin embargo, algunos afirman haber visto al fantasma de la Dama Blanca de Kinsale (también conocida como la Dama de Blanco de Kinsale). Hasta 1921, Charles Fort estaba en uso y los soldados y sus familias solían vivir allí. En una historia, una enfermera vio a la Dama de Blanco sobre un niño dormido. En otra, la Dama Blanca fue vista mirando por encima de una barandilla por la hija de un sargento. El padre de la niña y su colega, quienes estaban con ella, sin embargo, no vieron al fantasma.

Fuente: Leyendas, Mitos, Misterios y Enigmas del Mundo

sábado, 3 de julio de 2021

Leyenda De La Mesa De Arturo

 


Al este del río Wye, entre Inglaterra y Gales, se levanta uno de los monumentos megalíticos más conocidos, después de Stonehenge, de todo Reino Unido. La Piedra de Arturo recibe su nombre por su relación con el mítico rey que luchó contra los sajones en torno al siglo V. Aunque el conjunto tendría su origen en el Neolítico, las últimas investigaciones apuntan a que su construcción es incluso anterior a lo que se creía.

Las excavaciones llevadas a cabo este año en el dolmen han revelado que previamente el lugar estuvo ocupado por un montículo de tierra que apuntaba a otra estructura cercana. Cien años más tarde, fue "reconstruido y alineado en una dirección distinta, apuntando hacia las colinas al sur del monumento", como ha explicado Julian Thomas, profesor de arqueología de la Universidad Manchester, a la revista Live Science.

"Se trata de un espacio ceremonial, como los de Stonehenge y Avebury, aunque anterior a ambos", ha apuntado. Según Thomas, el lugar debió de tener "una gran importancia ceremonial y espiritual" al comienzo del Neolítico.

La Mesa de Piedra

La Piedra de Arturo se compone de nueve grandes rocas verticales que sujetan una inmensa piedra angular de más de 25 toneladas. El lugar sirve como entrada a un pasaje inferior que los investigadores vinculan a un lugar de enterramiento, aunque no se han llegado a encontrar restos mortales en su interior.

La importancia del lugar no se dirimió en los siglos siguientes: en el siglo XV, durante la Guerra de las Dos Rosas, entre las casas de Lancaster y York, el monumento fue testigo de un importante duelo entre caballeros. En 1645, durante la guerra civil inglesa, el rey Carlos I cenó allí con su ejército en un episodio del que C.S. Lewis tomaría como inspiración para su ‘mesa de piedra’ de las Crónicas de Narnia.

El primer montículo de tierra que se levantó donde ahora se erige el monumento apuntaba, según los investigadores, hacia los llamados Salones de los muertos, un lugar de enterramiento descubierto en el año 2013 por el propio Thomas y su equipo a menos de un kilómetro del dolmen de Arturo. Un conjunto de estructuras de madera que fueron deliberadamente quemadas y sustituidas por tres montículos funerarios de tierra, posiblemente tras la muerte de un importante líder local.

La colina original se sustentaba por una estructura de madera que se vino abajo por la podredumbre. Doscientos años más tarde se construyó un segundo monumento —muy posiblemente a partir de las piedras que se encuentran hoy en el segundo montículo—, que contaba con una 'avenida' de estacas de madera verticales que apuntaban hacia un espacio entre las colinas de Skirrid y Garway, hacia el sudeste, a unos veinte kilómetros de distancia.

Dicho espacio podría tratarse, según los arqueólogos, de "un camino para los viajeros marcado hace más de cinco siglos, o la fuente de algún tipo de recurso". Aunque estas hipótesis se basan en conjeturas, dejan claro que este lugar en el condado de Herefordshire ha sido durante miles de años un importante lugar de reunión para las comunidades que lo habitaron.

A pesar de que varias leyendas locales relacionan el dolmen con la leyenda artúrica, queda demostrado que su construcción se llevó a cabo miles de años antes de la supuesta llegada del monarca, cuya existencia ha sido puesta en duda por la mayoría de la comunidad histórica. Sin embargo, la estrecha relación entre el lugar y el mítico rey acabó dándole el sobrenombre de Piedra de Arturo.

Según las crónicas, una de las marcas sobre la roca se produjo cuando Arturo se arrodilló sobre ella para rezar; otras relacionan las hendiduras con los codos de un gigante derrotado por el popular personaje; mientras que algunos escritos señalan el lugar del conjunto como la tumba del propio monarca.

Fuente: Leyendas, Mitos, Misterios y Enigmas del Mundo

La Leyenda Artúrica De Elaine de Astolat, La Dama De Shalott

 


Elaine la Justa, Dama de Shalott, llega hasta nosotros a través de la leyenda Artúrica aparentemente con un solo propósito: amar a Lanzarote y, al hacerlo, revelar la imperecedera pasión de éste por la reina de Camelot, Ginebra. Sin embargo, el gran número de versiones de su historia a lo largo del tiempo, que al parecer se inician con la novela del siglo XIII Il Novellino, obra del autor Italiano Masuccio Salernitano, ponen de manifiesto que su relato es mucho más profundo. Más allá de resaltar el amor de Lanzarote por Ginebra, Elaine representa además la pureza Artúrica, el honor y el poder que puede ejercer una mujer al sentirse herida.

La versión más popular de la historia de Elaine fue escrita en el siglo XV por el autor Inglés Sir Thomas Malory, que no inventó la historia sino que se limitó a combinar un gran número de diferentes relatos Artúricos de amor y de honor en el extenso texto, Le Morte d'Arthur (“La Muerte de Arturo”).En la versión de Sir Malory, el lector conoce a Elaine en el decimoctavo libro de la novela, justo después de la búsqueda del Santo Grial, o Sangreal como lo llama Malory.

Aunque el Libro 18 de Le Morte d'Arthur no empieza con Elaine, se le ofrece al lector un breve resumen de las peripecias de Lanzarote desde el final de su gesta, resaltando en especial que ha reanudado su relación con la Reina Ginebra, y que el Rey Arturo está de hecho sospechando de ambos. Para evitar ser descubierto, Lanzarote se muestra esquivo con Ginebra, y esto provoca que la furiosa reina le destierre de Camelot. Tras una serie de incidentes en los que se nos muestra a Lanzarote participando en justas contra miembros de la corte del Rey Arturo, siempre bajo algún disfraz, se nos dice que Lanzarote viaja a la corte de Sir Bernard de Astolat y participa en nombre de Bernard en uno de los torneos de Arturo. Elaine, hija de Bernard, que solo ahora nos es presentada, queda prendada de él casi inmediatamente, y le solicita que lleve una prenda blanca en su honor en el torneo, a lo que él jamás habría accedido a causa de su amor infinito por la reina de Arturo. Pero esta vez, aunque oculto bajo su disfraz, acepta.

El torneo da comienzo y Lanzarote, como el ávido lector de historias Artúricas no se sorprenderá al descubrir, vence a los hombres de Arturo, pero resulta herido en el combate. Uno de los hijos de Bernardo, Lavaine, le lleva a un ermita para curarle, pero los acontecimientos se desarrollan de tal manera que Lanzarote acaba finalmente en los aposentos de Elaine, siendo atendido durante muchos días por ella hasta que recobra por completo su vitalidad. Ya recuperado, Lanzarote se dispone a marcharse, afligiendo terriblemente a la encandilada Elaine, que le ruega que la tome como esposa, o al menos que pase una noche con ella. Él rehúsa la oferta, pues su corazón pertenece a Ginebra, y abandona el castillo de Sir Bernard. Antes de que hayan pasado diez días, Elaine muere de tristeza.

No obstante, la historia de la Dama no acaba con su muerte. Antes bien, Elaine había dejado a su familia instrucciones específicas acerca de cómo cuidar de su cadáver después de su fallecimiento. Les indicó que debían depositar su cuerpo inerte en una balsa con un lirio en una mano y una carta de su puño y letra en la otra, y abandonarla flotando a la deriva en el río Támesis. En este río, a su paso por Westminster, es descubierta por el Rey Arturo y su esposa la Reina Ginebra, y tras leer Lanzarote la carta, se da cuenta de que él fue la causa de su muerte. Arrasado por la culpa, paga un espléndido y costoso funeral para la muchacha, siendo más tarde, irónicamente, empujado de nuevo en brazos de Ginebra, quien, tras leer la carta de Elaine, descubre que Lanzarote se había mantenido fiel a su amor durante todo este tiempo después de su destierro. La historia de Elaine acaba aquí, con su entierro ante los hombres y mujeres de la corte de Arturo.

Aunque trágico, el personaje de Elaine se olvida a menudo como mujer esencial dentro de la mitología Artúrica. Su único propósito parece ser revelar hasta qué punto la pasión de Lanzarote por Ginebra es indestructible, aun cuando su romance con la reina era algo prohibido. Pero el corazón destrozado de Elaine de Astolat ha inspirado numerosas versiones de su historia, desde una canción que parte el corazón compuesta por Emilie Autumn al poeta del siglo XIX Sir Alfred Tennyson. La narración de Tennyson es verdaderamente la variante más destacada del relato, titulada “La Dama de Shalott”, y en ella el destino de Elaine es aún más doloroso que en la historia de Malory.

En el relato de Tennyson, Elaine—conocida simplemente como la Dama—se encuentra aislada en una torre a orillas de un río sin nombre que fluye hasta Camelot. Aquellos que viven en sus cercanías saben poco de ella, y pasa los días tejiendo imágenes frente a un espejo que le muestra el mundo reflejado a través de una ventana, viendo su vida pasar literalmente. Supuestamente ha caído una maldición sobre ella, desconocida en la historia de Malory, que le impide participar de la vida más allá de su torre. A través de este espejo es como Elaine ve a Lanzarote, que pasa cabalgando junto a la torre sin intercambiar una sola palabra con la Dama, pero no obstante ella se enamora de él. Su maldición se hace realidad cuando abandona su trabajo e intenta mirar más allá del cristal, por la ventana, para ver a dónde se dirige su amado. Al hacerlo, su muerte es inminente. Alcanza el río en una barca, y en ella muere antes de llegar al palacio. Otro detalle irónico se da nuevamente, pues Lanzarote observa su bella silueta y lamenta que haya muerto tan joven.

Aun otro relato de Elaine retrata a esta mujer de manera diferente, ni afligida ni desconsolada por su amor no correspondido, y es anterior en siglos tanto a la versión de Malory como a la de Tennyson. En Mort Artu, una variante francesa de la historia que siguió directamente a la de Salernitano, Elaine es un personaje mucho más vengativo, pues engaña a Lanzarote para que lleve su prenda en el torneo y le implica en su muerte escribiendo una muy cruel carta póstuma que se deposita sobre su cadáver. Aunque está versión fue rápidamente eclipsada por otros relatos más emotivos, su importancia radica en el poder que reside en sus personajes femeninos: en Elaine, que fue capaz de hacer que Lanzarote cediera a su capricho, y en Ginebra, ya que Lanzarote temía su reacción en caso de acceder a las pretensiones de Elaine. Este tema pierde importancia en relatos posteriores, pero no cae por completo en el olvido, ya que se culpa específicamente a Ginebra del abandono de Elaine por parte de Lanzarote en la novela de Malory.

Aunque se han escrito más historias sobre la evanescente Elaine de Astolat, las narraciones de Malory y Tennyson siguen siendo las más destacadas, pese a ser versiones radicalmente diferentes del relato de la doncella. Ambas nos hablan de un corazón destrozado y de la tristeza de un personaje cuyo lugar en la línea argumental Artúrica es corto, y en algunos aspectos, insignificante. Pese a todo, el personaje de Elaine se ha convertido en símbolo del romance Artúrico tanto como Lanzarote y Ginebra, y está considerada por muchos un icono de la pureza y la virginidad medievales.

Fuente: Leyendas, Mitos, Misterios y Enigmas del Mundo