Este príncipe del infierno controla la avaricia, el materialismo y la codicia; es aquel que siente satisfacción por las diferencias y separaciones entre ricos y pobres, por la sed del dinero y del poder. Básicamente, su creencia se penetra en la sociedad de la Edad Media, es por ello que existen muchos mitos y leyendas que definen a Mammón como un embajador del infierno que observa al mundo desde una cueva de riquezas inimaginables, para convertirlos en pecadores y esclavos del dinero: todo lo anterior, tiene la finalidad de formar a las personas avaras que habitan en el mundo consumista de hoy en día.
Así pues, es evidente que ningún otro demonio, más que Mammón reina hoy en nuestro mundo.
De la misma manera, él es un demonio que hace a las personas actuar con pereza, desidia, conformismo, comodidad, sentimientos que son responsables de la apatía y de la mediocridad.
Fuente: https://hablemosdemitologias.com/
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