Lo primero de todo es contextualizar el tema. El universo de las deidades del vudú siempre ha estado presidido por Legba. Esta divinidad funciona como balanza entre los hombres y los espíritus mayores o menores. Dentro de los espíritus mayores, también conocidos como loa, se encuentra el dios serpiente Damballah, que preside la virilidad y la fuerza. Es a esta deidad a quien se le formulan los deseos de acrecentar o disminuir la salud y potencia de una persona. Si hablamos del sentimiento más poderoso del ser humano, el amor y todo lo relacionado con él, es controlado por la diosa Erzulle, tanto para hacer el bien, como hacer el mal. Con estos conocimientos, podemos comenzar con la explicación.
Llevar a cabo una sesión de Vudú es sencillo y sangriento a la vez: Lo primero que se debe hacer es invocar a los loa a través de un baile frenético al son de tambores y cánticos, a la espera de que algún espíritu menor posea a los asistentes. Estos bailes de deben hacer en sitios sagrados en relación con esta práctica y siempre habrá presente un sacerdote o sacerdotisa vudú. Ellos son los encargados de dibujar en el suelo los veves o símbolos mágicos y de iniciar la sesión. Todo el ritual del vudú se encamina a ganar el favor de los loa, quienes se dignarán a poseer a los fieles y concederles deseo de prosperidad, cura o destrucción de los enemigos.
Todo ritual finaliza con una muerte. En su mayoría los sacrificados son gallinas o cabritos. Se ha acusado a los practicantes de realizar sacrificios humanos, pero nunca se ha demostrado. Si un loa ha oído nuestras plegarias, poseerá al participante de dicho ruego, que comenzará a bailar frenéticamente, balbucear y gritar.
Sabemos que todos esperabais el tipo de vudú de muñeco de trapo y pinchazo en el culo, y aquí os dejamos explicada esa variante. Este estilo de magia negra se llama Bokor, se utiliza una estatuilla de cera, un muñeco de trapo, una fotografía o dibujo de aquello que se quiere dañar. El precio a pagar es muy caro, en dinero o especias, y el resultado puede llegar a ser permanente.
No hay comentarios:
Publicar un comentario