jueves, 9 de junio de 2016
¿Por Qué Se Llama Capilla Ardiente Al Lugar Donde Se Vela a Un Difunto Importante?
Efectivamente, el vocablo ‘ardiente’
(dentro de la expresión ‘capilla ardiente’) proviene de las
velas que ardían (y en su extensión iluminación) durante el tiempo
en el que se velaba y honraba un difunto en las horas previas a la
celebración del funeral y posterior sepultura.
Para destacar la importancia del
finado, normalmente suele decirse capilla ardiente en lugar de
velatorio y esta se instala (dependiendo de la relevancia de la
persona fallecida) en un lugar donde pueda acudir un gran número de
personas que van hasta allí con el propósito de presentar su
respeto, dar las condolencias a los familiares o rezar alguna
oración. Durante todo el tiempo en el que permanece instalada la
capilla ardiente ésta se mantiene permanentemente iluminada,
situando el féretro en el centro rodeado de ornamentos luminosos.
Años atrás ese alumbrado provenía de
las velas e incluso antorchas o candelabros que se colocaban
alrededor del ataúd, pero en la actualidad son muchos los casos que
se dan en el que los ornamentos lumínicos son eléctricos (bombillas
o luces LED que simulan ser velas).
Antiguamente, tal y como su nombre
indica, esas honras de duelo previas al funeral se instalaban en una
capilla, bien fuese de un edificio religioso (iglesia, catedral…) o
incluso que estuviese dentro de una propiedad particular (normalmente
de la persona fallecida), ya que los miembros de la aristocracia y
burguesía solían disponer de capilla propia.
Hoy en día se utiliza cualquier
espacio en el que instalar una capilla ardiente, debido a que ya no
es algo que se disponga por la importancia o abolengo del fallecido,
sino por la relevancia que éste tuvo en la sociedad (políticos,
actores, deportistas, escritores…) siendo cada vez más común
alojarlas en pabellones, teatros, ayuntamientos…
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario