La leyenda de Amityville

Voy a revivir una de las leyendas más populares de terror en Estados Unidos y que fue la trama de la cinta de terror que más ha marcado mi vida como cinéfilo, se trata de la película The Amityville Horror (Terror en Amityville) realizada en 2005 por MGM, en realidad es ultimo remake de la película original protagonizada por James Brolin y Margot Kidder en 1979.

Sabemos que películas de terror hay por montones, pero lo que llamó la atención del publico en la versión original de The Amityville Horror fue el hecho de que afirmaban que estaba basada en hechos reales, los productores de la versión de 2005 también se sintieron intrigados, más que por los detalles y la historia, por el hecho de que supuestamente la historia fuera real.

Pero la leyenda de una casa infestada de demonios en Amityville, Nueva York tiene su comienzo dos años antes, en 1977, en un libro que se convirtió en best-seller ese mismo año. The Amityville Horror: A True Story escrito por Jay Anson. Anson no era el propietario de la casa ni mucho menos, se trataba de un escritor profesional contratado para redactar un libro sobre “hechos reales” que tuvieron lugar en ese sitio unos años antes.

La leyenda detrás de la historia comenzó el 13 de noviembre de 1974, luego de que seis miembros de una familia residente en Amityville, Nueva York fueran brutalmente asesinados. Ronald y Louise DeFeo, padres de la familia, fueron fusilados en la cama mientras dormían junto con sus dos hijos y dos hijas. El único sobreviviente de la familia Ronald Jr, alias “Butch”, fue detenido por el crimen, declarado culpable y condenado a prisión.

Con la familia muerta y el único heredero en prisión la casa fue vendida. La terrible naturaleza de la masacre irrumpió en la tranquilidad del barrio de Long Island, aunque no se reportaron nuevos sucesos paranormales la casa de la historia fue asociada con la número 112 de Ocean Avenue.

Un año después, una nueva familia, los Lutz, se mudaron a la 112 de Ocean Avenue. George y Kathy Lutz junto con sus tres hijos afirmaron que poco después de instalarse, las seis habitaciones de la casa se convirtieron en un infierno. Una fuerza invisible arrancaba las puertas de las bisagras, azotaba los gabinetes y destruía todo a su paso. Además contaron que un enjambre de insectos de proporciones bíblicas atacó a la familia entera y que una cara demoníaca con ojos brillantes se asomaba a la casa durante la noche dejando rastros de pezuñas hendidas sobre la nieve. Un sacerdote fue llamado a bendecir el hogar pero salió huyendo del sitio con terribles heridas en sus manos. Una escena icono de cine de terror es cuando el sacerdote es expulsado de la casa por una voz demoníaca que le dice: “SAL DE AQUÍ“.

Un equipo de televisión local hizo una investigación de la casa, junto con supuestos “cazadores de fantasmas” y psíquicos. Todos concluyeron que la casa estaba poseída por un espíritu demoníaco y que se necesitaba de un exorcismo para detener la actividad paranormal. Los Lutz abandonaron la casa y junto con sus cosas se llevaron su historia que después contarían a Anson para la creación del libro The Amityville Horror.


Durante un largo tiempo la historia se contaba como verdadera, pero a medida que varios investigadores descubrían discrepancias en lo relatado por los Lutz el fraude se hizo evidente, finalmente el abogado de Butch DeFeo, William Weber, admitió que había creado la historia junto con los Lutz, que la casa jamás estuvo encantada y que todo lo relatado por la familia fue fabricado.

Si hacemos un poco de memoria una de las películas más aterradoras del cine, “El exorcista”, fue estrenada en 1973, un año antes del asesinato de la familia DeFeo, esa fiebre de demonios haciendo posesiones publicitada por una cartelera de cine en conjunto con los supuestos “investigadores paranormales”, fueron pieza clave en la imaginación de los Lutz.

Sin embargo, los Lutz apegados a su historia, obtuvieron decenas de miles de dólares de los derechos del libro y el cine. A pesar del cuento de los Lutz, es verdad la trágica historia de la familia DeFeo y hasta el día de hoy los habitantes que siguieron en la casa 112 de Ocean Avenue siguen siendo acosados y molestados por curiosos y personas que creen en la leyenda de The Amityville Horror.