domingo, 1 de julio de 2012
Pueblo Fantasma en EE.UU.
Todos deben recordar aquellas películas hollywoodenses en la
que pueblos anteriormente prósperos gracias a la minería, se convertían al cabo
de un tiempo en ciudades desoladas, invadidas por el polvo, sumidas en el
olvido. Llegaba la noche y los infortunados protagonistas de la película, se
veían en mil situaciones en la que los fantasmas abundaban por diestra y
siniestra.
Estos pueblos no solo viven en la imaginación de los
directores y guionistas de las películas, sino también en algunos remotos
lugares del mundo, olvidados por el tiempo. Uno de estos pueblos se encuentra
en el desierto de California. Su nombre: Bodie, 120 kilómetros al sureste del
Lago Tahoe.
De los fantasmas no se tiene evidencia alguna, tan solo
rumores, sin embargo lo que sí se ha convertido en una leyenda urbana es que
los visitantes que osan a llevarse algo de la ciudad a sus casas sufren una
maldición que los hace devolverlas lo más pronto posible. ¿Crees que sea
cierto?
Los inicios del pueblo de Bodie fueron como campamento
minero en el año 1859, cuando William S. Bodey y su empresa hicieron un rico
descubrimiento de oro en una mina cercana. Lamentablemente no llegaron a
explotarla debido a que muy poco tiempo después fallecieron en una tormenta
camino a Monoville. Años después, la Standard Company se hizo cargo de la mina
en el año 1876 y convirtió al pequeño campamento minero en una ciudad hecha y
derecha, con los establecimientos necesarios que le permitieran llevar una vida
normal y moderna para la época.
Para el año 1880, Bodie había crecido tanto que tenía una
población de 7 a 8 mil habitantes. En total, la mina de la ciudad de Bodie
produjo ganancias de aproximadamente 34 millones de dólares. Entre las
construcciones que se hicieron en la ciudad se encontraban dos bancos, un
ferrocarril, una cárcel, multitud de bares, tan solo dos iglesias y además se
fundaron algunos periódicos.
En el año 1893, la Standard Company decidió construir su
propia planta hidroeléctrica lo que generó aún más el crecimiento de la ciudad
de Bodie. Pasaron los años y la mina dejó de producir el preciado oro.
¿Entonces qué ocurrió? Lo que imaginas…La ciudad fue abandonada de a pocos para
convertirse finalmente en lo que actualmente es: Una ciudad fantasma.
En el año 1961, fue nombrada como Monumento Histórico
Nacional y en el año 1962 llegó a obtener la denominación de Parque Histórico
Estatal. Los valientes visitantes caminan entre calles desoladas por las que
alguna vez transitaron hasta 10,000 personas, las que tal vez se hacen presentes
cuando el manto de la noche cubre Bodie.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario