Gomory es un demonio femenino que suele ser representada
sobre un elegante camello, coronada con una diadema y envuelta en una túnica
traslúcida.
Su especialidad es volver apasionadas a las mujeres
indiferentes, e incluso insensibles al amor.
Aquellas que se encomiendan a su patrocinio descubren con
asombro las maravillosas posibilidades de su sexualidad.
Claro que todas las bendiciones infernales tienen su costado
oscuro, y las administradas por Gomory son ciertamente sombrías.
Muchas de las damas que reclaman su ayuda para mejorar su
vida amorosa lo hacen a través de la imposición de sus maridos; un error fatal
del que pronto se lamentarán, ya que Gomory solo asiste a las mujeres indiferentes,
nunca a las insatisfechas.
La leyenda de Gomory nos obliga a especular que los hombres
del desierto no son amantes particularmente atentos, al menos desde una medida
occidental.
Cualquier síntoma de insatisfacción es atribuido
exclusivamente a la mujer, y nunca a la impericia en las caricias viriles.
Gomory no tolera bajo ningún concepto esta situación.
No soporta que una mujer quede insatisfecha por la insensibilidad del hombre, por lo que revierte la ecuación de forma drástica; haciendo que las insatisfechas damas se conviertan en verdaderos súcubos, logrando de este modo consumar aún las fantasías más inconfesables.
Fuente: wikipedia.org
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